jueves, 2 de febrero de 2017

Bonsái Ficus Ginseng: Cuidados

La planta se caracteriza por un tronco muy amplio y con nudos; lo que hace que esta parezca más antigua, incluso cuando la planta todavía es joven. Las hojas son grandes y brillantes; promover o crear, el desarrollo de hojas pequeñas, será el mayor desafío que un “artista del bonsái” enfrente, cuando tenga la intención de cultivar un bonsái ficus ginseng.

Las hojas son perennes, y tienen desarrollo bastante continuo durante todo el año.





Cuidados del bonsái ficus ginseng


Suelo


El bonsái ficus ginseng  crece en un terreno fresco, por lo que un buen drenaje en el suelo es muy necesario.

En el sustrato se puede utilizar una mezcla de tierra, con contenido de 1.3 de arenilla.  No son muy quisquillosos con los tipos de suelos; por lo que una mezcla básica para Bonsái, será suficiente.

Luz


El ficus ginseng disfrutará de la luz solar directa, cuando sea posible. Si tiene esta planta en el interior de su casa, colóquela cerca de una ventana donde pueda recibir suficiente sol.

Riego


El riego debe ser abundante en verano y poco en invierno, evitando el encharcamiento o la sequia. En la época de crecimiento agradecen un riego generoso.

Una forma de riego, es colocar un plato o recipiente con agua debajo de la maceta; para que el líquido sea absorbido, por debajo de la maceta. En verano se puede dejar esta bandeja, con un poco de arenilla para crear un microambiente, parecida a sus zonas de origen; pero en invierno es mejor quitarlo.

Nebulización 


Los bonsáis ficus ginseng crecen mejor, si se sienten como en casa. La nebulización (lluvias) es común en las selvas tropicales, a fin de tratar de replicar este ambiente. Utilice un atomizador con agua, para rociar regularmente las hojas de la copa. Pero sin exagerar.

Poda


A este tipo de planta no les  gusta una poda agresiva, por lo tanto es mejor podar las ramas pequeñas, solo cuando sea realmente necesario.

Abono


El abono o fertilización, se lo debe hacer en principios de primavera hasta mediados de otoño, para conservar unos buenos nutrientes, en la época más fría.


Enfermedades e insectos


Cuando las hojas tienen manchas amarillas (esto a menudo pasa) por el ataque de la araña roja. Entonces será bueno hacer frente con un acaricida biológico. Se los puede encontrar, en tiendas de jardín.

Cuando en las hojas del bonsái, aparecen unos racimos blanquecinos y se vuelven pegajosos, es el resultado del ataque de las cochinillas; el ficus ginseng es muy sensible a estos insectos. Sobre todo en lo más interior del árbol.

Si el bonsái ficus ginseng pierde sus hojas, puede ser simplemente por demasiado riego; o la falta de humedad; o la falta de luz. Asegúrese de regar adecuadamente el suelo y que la ubicación sea la idónea.

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